LA MAGIA DE MONTILLA-MORILES
¡¡ Buenos días amig@s !!
El pasado 5 de abril un trocito de Montilla-Moriles estuvo presente en nuestra Vinoteca, gracias a los amig@s de Toro Albalá, con su delegado comercial José Carlos Varo al frente.
Bodegas Toro Albalá nace en el corazón de la campiña cordobesa en el año 1922. Su historia es la propia de un pequeño agricultor, José María Toro Albalá, que tuvo la genial idea de guardar vinos viejos para la creación de joyas enológicas destinada a los paladares más exigentes. Una filosofía que supo implantar en los valores familiares y que aún se conservan. Considerada una hazaña teniendo en cuenta la situación de la época. Pero, que ha valido para que los Toro Albalá estén en las mejores mesas de todo el planeta. Los vinos finos eran lo más consumido en los años treinta por una población andaluza que acudía a las tabernas de los barrios y que en su mayoría se dedicaba al trabajo del sector primario. El escenario de la bodega era una antigua central eléctrica de la zona, lo que dió juego a las bromas de los andaluces que denominaron que el vino tenía electricidad o era eléctrico, de ahí el famoso nombre al fino “Eléctrico” que aún conserva hasta nuestros días.
Efectivamente, anoche tuvo lugar la presentación de Bodegas Toro Albalá, la cual tiene su sede en Aguilar de la Frontera (Córdoba). José Carlos comenzó sumergiéndonos en los orígenes de esta ancestral Bodega, cuya proximidad a la central eléctrica de dicha localidad justifica el nombre del primer vino que se probó en la noche de ayer: Fino eléctrico en rama; excelente fino que hizo los honores de inaugurar la jornada.
Tras ello, llegó uno de los momentos estelares de la noche: la cata del Palo Cortado Marqués de Poley 1964. Hablar de este producto no supone mencionar un palo cortado cualquiera, sino un producto proveniente de una saca histórica de la Bodega (1964), constituyendo asimismo un producto altamente novedoso, puesto que su salida al mercado se produjo no hace más de seis meses.
La noche prometía, y llegaba la hora de los Don PX. En primer lugar, era el turno del fantástico Don PX 2016; para a continuación llegar el Don PX Gran Reserva 1987 para poner el colofón final a una noche inolvidable.
Asimismo, y por si fuera poco, nuestr@s fieles amig@s y vecin@s de La Reunión Grill (Plaza Itálica, Pueblo Nuevo de Guadiaro) nos prepararon un maridaje óptimo para la ocasión.
Por todo ello, nos gustaría agradecer de corazón a Toro Albalá y Jose Carlos; a La Reunión; así como al público asistente; su inestimable contribución a esta Jornada, ya que entre tod@s conseguimos hacer de ella una noche para el recuerdo.